PANORAMA REGIONAL
Centroamérica está dividida en países mayormente productores de granos de cacao, como Nicaragua y Honduras, y en países que se especializan en transformación como El Salvador y Guatemala -aunque estos últimos sí producen en menor escala-, quienes están agregando valor a la producción y abriendo mercados regionales e internacionales. Se contabiliza que, a nivel de la región existen 25 mil 957 productores individuales que disponen de 23 mil 89 hectáreas de cacao, participando Nicaragua con el 53.2% de estas. Del total de áreas de cacao disponibles, un 60 % son áreas en desarrollo que aún no entran a su etapa productiva.
En el marco institucional, los gobiernos han mostrado interés en apoyar el sector cacao en los países. En Honduras ya existen expresiones de planificación nacional apoyadas por el Gobierno; y en El Salvador, Guatemala y Nicaragua, los gobiernos han desarrollado estrategias y políticas con una gran disposición en apoyar el fortalecimiento del sector.
Centroamérica en el mercado mundial
Centroamérica tiene una escaza participación en el mercado mundial de cacao y sus derivados del 0.6%. De la región, se destaca Guatemala con el 32 % y Costa Rica con el 31 % de las exportaciones de cacao y sus derivados. En términos de productos con valor agregado, Centroamérica exporta del valor total, el 78.8 % y en “commodities” exporta el 21.2 %. Es importante notar que la tendencia de crecimiento del mercado de cacao a nivel regional ha sido del 28.6 % desde el 2011 hasta la fecha.
Nicaragua y Honduras son los principales países exportadores de cacao en grano. Nicaragua exporta el 83 % del valor total de las exportaciones regionales, seguido de Honduras con el 11 %. El Salvador y Guatemala presentan montos pequeños de exportaciones. En producto terminado, los países mejor posicionados son Costa Rica y Guatemala, entre los dos acumulan el 73 % (2015) del valor total de las exportaciones de productos terminados a base de cacao, seguidos por El Salvador que aporta el 17.9 % del total de las exportaciones. Honduras y Nicaragua entre ambas, aportan el 9.1 %. El 80 % del total de las exportaciones de cacao y sus derivados se desarrolla a lo interno del área centroamericana. Se concluye que, en este sector, hay una fuerte dinámica de comercio pero que, en su mayoría, se encuentra en manos de sectores informales de la economía regional.
El destino de la producción de granos de Centroamérica está distribuido de la siguiente manera: el 52 % lo consume el mercado interno de cada uno de los cuatro países, el 32 % se exporta al mercado regional, Guatemala y El Salvador y el 16 % restante se exporta a Europa y Estados Unidos.
Se contabiliza que, a nivel de la región Centroamericana (Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua), existen 25,957 productores individuales que disponen de 23,089 hectáreas de cacao, participando Nicaragua con el 53.2% de estas. Del total de áreas de cacao disponibles, se estima que el 60 % son áreas en desarrollo que aún no entran a su etapa productiva.
Respecto a la producción de granos con calidad exportable a Europa y Estados Unidos, Nicaragua y Honduras han venido ganando experiencia en los procesos de cosecha y poscosecha, mejorando sus procesos desde la finca hasta el beneficiado, según los protocolos de calidad que les está exigiendo el mercado, ello ha permitido incrementar las exportaciones principalmente a Europa. Parte de la producción que va a estos mercados lleva algún tipo de sello certificado, como cacao orgánico, Rainforest Alliance, UTZ, FairTrade u otras.
En el marco institucional, los gobiernos han mostrado interés en apoyar el sector cacao en los países. En Honduras y Guatemala ya existen expresiones de planificación nacional apoyadas por sus gobiernos respectivos; en El Salvador y Nicaragua, los gobiernos se encuentran con una gran disposición en apoyar la reactivación del sector desde las políticas públicas. En este mismo marco se han estado fortaleciendo los siguientes espacios de diálogo nacional: la Mesa Nacional de Cacao de El Salvador, el Comité Nacional de Cadena de Cacao en Honduras, La Agro-cadena de Cacao liderado por la CONADEA en Guatemala y la Comisión Sectorial del Cacao en Nicaragua. Recientemente el Consejo Agropecuario Centroamericano, CAC adscrito al SICA, incluyó al sector cacao en su política de definición de prioridades, al reconocer en el mismo la existencia de una alta participación de pequeñas unidades familiares y la potencialidad del rubro para la adaptación al cambio climático por su manejo en sistemas agroforestales y para el desarrollo económico de la región.
Visión común regional
Como parte de la iniciativa regional para fortalecer el sector cacao, en 2016 Rikolto desarrolló cuatro talleres nacionales en El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, permitiendo identificar las principales limitantes de la cadena de valor de cacao en cada país, realizando la devolución de resultados en un taller regional que permitió realizar un análisis comparativo entre países, encontrando limitantes comunes a nivel de la región y priorizando las siguientes:
- Bajo nivel de organización de los productores gremiales-empresariales.
- Insuficientes estrategias de mercado.
- Ausencia de políticas públicas de fomento de la cadena de valor del cacao.
Estas limitantes sirvieron de base para identificar decisiones estratégicas a seguir que tuvieran concordancia con las limitantes regionales identificadas previamente, de manera que estas líneas estratégicas puedan ser recomendadas a los países para ser tomadas en cuenta a la hora de desarrollar los marcos estratégicos nacionales. Las principales líneas estratégicas recomendadas son:
- Creada y aprobada la Política de Fomento de la Cadena de Valor del Cacao a nivel nacional y regional, para fortalecer al sector cacaotero de la región.
- Fortalecer gremial y empresarialmente la organización de productores de cacao de Centroamérica.
- Recurso humano formado y especializado en los diferentes componentes de la cadena de cacao.
- Creación del Comité Regional de Gestión del Conocimiento.
- Contar con una estrategia regional de mercado.
Junto con esas líneas estratégicas se propusieron objetivos específicos y líneas de acción, y se identificaron a posibles actores interesados en tener una participación activa en el desarrollo de las propuestas.
Durante el taller regional se trabajó en elaborar y consensuar una propuesta de visión regional común. Se realizó un ejercicio con cuatro grupos de trabajo, para construir la propuesta de visión, la que fue consensuada con los y las participantes. Producto de este proceso se consensuó la siguiente visión-propuesta que permita fomentar el dialogo regional en torno a una visión compartida :
Ser un sector cacaotero integrado a nivel regional y posicionado en el mercado internacional.
Hubo un amplio debate sobre la temática, los distintos actores presentaron sus observaciones y sugerencias para construir dicha visión. Esta propuesta de visión presentada es un punto de inicio para fomentar el dialogo regional y buscar el consenso necesario.